Salón de Frankfurt: Renault sorprende con el Symbioz
Se trata de un concept eléctrico, de 600cv, que recrea la unión entre la utilidad de un auto y la comodidad de estar en el hogar. Es autónomo y conectado. También presentó el nuevo deportivo de calle con cinco puertas y nueva opción de caja de cambios
Renault fue una de las primeras marcas en presentarse en Frankfurt, uno de los salones más importantes de Europa, y lo hizo con pocos modelos que dieron mucho que hablar. La primera sorpresa fue el nuevo concept-car Symbioz, un modelo que abre las puertas del futuro, con la mira en 2030.0 Se trata de un vehículo eléctrico, autónomo y conectado con todos los demás elementos de su entorno, que tiene como objetivo hacer sentir a los pasajeros como si estuvieran en su casa: en la ruta, el vehículo se transforma en una prolongación del hogar. En casa, hace las veces de habitación adicional móvil, modular y multifuncional. El modelo es una berlina que tiene 4,70 metros de largo por 1,98 de ancho y 1,35 de alto. Para acceder al auto, hay cuatro puertas de apertura opuesta en la zona inferior y una superficie acristalada compartida en configuración alas de gaviota. Una vez dentro cuatro asientos independientes se orientan hacia el exterior para facilitar la entrada. En diseño, desde una mirada frontal, el concept se destaca el gran rombo de la marca, acompañado por ópticas reducidas a la mínima expresión que se prolongan en forma de C. En general, toda su línea exterior se caracteriza por un diseño con zonas bien marcadas, mientras que en el interior, el habitáculo de estilo burbuja está repleto de superficies acristaladas. Su carrocería es de fibra de carbono, con un tratamiento mate en la parte delantera y satinado en la parte trasera. Gracias a su tratamiento de cristal, todas las superficies de vidrio (cristal o policarbonato) maximizan la transparencia y facilitan el paso y la difusión de la luz en el habitáculo. El diseño específico del techo, que parece suspendido sobre el habitáculo, limita las superficies de unión con estructuras metálicas en beneficio, una vez más, de la luminosidad. Además de mármol, porcelana, madera y lino para las distintas superficies, el interior del prototipo tiene una pantalla OLED de 80 cm que hace las funciones de cuadro de mandos e interfaz para el sistema de infoentretenimiento y un volante de formas modernas que se esconde al conectar el sistema de conducción autónoma, los pedales se retraen y los asientos delanteros se pueden mirando hacia atrás. Las llantas recuperan en su diseño el principio de los radios de las ruedas de bicicleta. Cubiertas por neumáticos Michelin slimline de banda estrecha, estas llantas han sido desarrolladas de manera específica por el fabricante francés con la finalidad de maximizar la eficacia energética del vehículo. Al igual que en el concept-car TREZOR, los logotipos Renault situados en la parte delantera, la parte trasera y los laterales del vehículo se iluminan en modo autónomo y los deflectores traseros de la carrocería incorporan sensores y cámaras que el sistema de conducción autónoma. En cuanto a la motorización, tiene dos motores eléctricos de imanes permanentes capaces de generar 500 kW (680 CV) de potencia y 660 Nm de par motor. Por ejemplo, cuando no se programa ningún trayecto importante para las próximas 48 horas, la batería del vehículo utiliza la carga mínima (conservando suficiente energía para un desplazamiento puntual corto, por ejemplo) con objeto de optimizar la distribución de la electricidad en el hogar. Por el contrario, si se programa una salida de fin de semana para el sábado por la mañana, la batería del vehículo se cargará al máximo durante la noche del viernes al sábado, disminuyendo progresivamente la calefacción de la vivienda. Por otro lado, se puede programar la utilización o no de la energía almacenada en las baterías para alimentar temporalmente las luces, pantallas y equipos domésticos de la vivienda en periodos de sobreconsumo. En caso de fallo eléctrico, este cambio se produce de forma automática.El nombre
Symbioz procede del término “simbiosis” y hacía referencia a su conexión con el domicilio del propietario. La unión entre vehículo y hogar entendido por Renault se refleja en un habitáculo que es la prolongación de la casa y una casa condicionada por las necesidades de transporte. La conexión total se expresa como un auto que es una habitación más de la casa que el fabricante a expuesto de forma paralela en Frankfurt: un edificio de 120 metros cuadrados: dentro del habitáculo el auto lleva a destino mientras se trabaja. En su presentación, se muestra como un elevador permite trasladar el vehículo de la planta baja a la habitación y a la terraza de la planta superior. Situado sobre el techo, Symbioz se convierte en una auténtico refugio para relajarse o aislarse disfrutando del exterior.