La marca anunció los cambios tras la devaluación. Modificó la lista de precios, continúa con el Plan Agosto 0km  y ofrece algunas versiones tal como se vendían antes de las elecciones y la suba del dólar.

Son días de decisiones para las automotrices. Después de suspender las ventas por 24 o 48, tras los resultados de las PASO y la incertidumbre del mercado, empiezan a volver a la normalidad. Con un dólar que saltó de $45 a $61, con subas y bajas en cuestión de horas, tuvieron que frenar la facturación y reordenarse. Todo se da en un contexto donde los patentamientos no venían de lo mejor, pero igual había que llevar los valores a los nuevos niveles de la economía, teniendo en cuenta que los autos son importados o se fabrican en el país con un alto componente de piezas traídas del exterior. Después de los primeros días de tinieblas empezaron las señales, y con Chevrolet y Renault con subas que llegaron a 23% en la primera y algo menor en la segunda, llegó el turno de Fiat. La marca anunció que el incremento de las listas de precio para que los concesionarios sigan operando con normalidad es de 12%, sin embargo tienen algunas buenas noticias. La primera es que cuatro versiones se mantienen sin cambios, es decir, con los valores previos al aumento del dólar. Estos son la versión de la Toro Freedom Diésel, el 500X Pop, Abarth y Dobló. Por otro lado, tal como ratificó el ministerio de Industria y ADEFA, se mantiene el plan Agosto 0km. Es decir, sobre los nuevos listados de precio, habrá bonificaciones de $50.000 a $90.000 para las ventas al contado. Marcas como Ford, Volkswagen y Peugeot todavía no comunicaron los nuevos listados de precio, aunque todas siguen en el plan de bonificaciones del momento.

Tras la escalada del dólar que comenzó en el día de ayer, y la decisión de muchas firmas de suspender las ventas, la automotriz retocó los precios y confirmó que los concesionarios operan con normalidad

El lunes “post elecciones  2019″quedará en la historia como uno de los más caóticos de los últimos tiempos: suba de dólar, caída de acciones de las grandes empresas, salto del riesgo país y un nivel de incertidumbre política que ni un sector quedó exento de las malas noticias. En el caso de las automotrices, la primera decisión de las terminales fue suspender la facturación a los concesionarios, quienes en consecuencia hicieron lo mismo con sus clientes. Hoy, para traer algo de tranquilidad al mercado, Chevrolet tomó la decisión de ajustar los precios de los autos un 23 por ciento, de forma tal que los concesionarios sigan operando y se puedan reanudar las operaciones que habían quedado por la mitad o que se arrastraban de la semana pasada. Por otro lado, en cuanto al plan Agosto 0km, desde la marca explicaron que esperan definiciones del Gobierno sobre la continuidad, y si es así, será aplicada la bonificación sobre el nuevo precio de los autos. Recordemos que el plan fue lanzado por el Gobierno en junio para incentivar la venta de autos, con descuentos de $50.000 a $90.000, lo cual ayudó a que la industria recupere el optimismo levemente. Ahora, las expectativas están nuevamente a la baja y se estima que el sector cerrará 2019 con unas 450.000 ventas. Por el momento, Chevrolet fue la única marca que tomó una decisión firme de cómo seguir operando en el nuevo contexto, mientras que el resto está en tiempo de espera tomando decisiones. Toyota, por otro lado, es la única que confirmó que seguirá vendiendo en agosto con los mismos precios que se lanzaron al inicio del mes.