Alberto Príncipe, presidente de la Cámara Argentina del Automotor, le dijo a Motriz que las ventas caen porque los vehículos están muy caros. Los valores se deben reacomodar a un nuevo contexto, donde los 0km están más baratos por las bonificaciones y descuentos, además de ofrecer financiación a tasas bajas

Mercado raro el de los autos si los hay. Las
ventas de usados acumulan una
baja de casi 8% en lo que va del año, a contramano de lo que pasa en el segmento de
0km, con patentamientos que
crecen casi un 7% en los primeros seis meses del año. Pero lo más extraño es que, hasta el año pasado, la dinámica de la industria era justamente al revés: caían los nuevos y crecían los seminuevos.
Los cambios en las reglas de juego a partir del nuevo Gobierno dieron lugar al
brusco golpe de timón. Hoy, con importaciones sin restricción y con el impuesto interno rebajado, todo es más sencillo para la venta de un auto nuevo. Las marcas tienen mayor stock, y ante la gran oferta, es la demanda la que tiene el poder, por lo cual la guerra de precios es un “clásico”.
Como contrapartida, los
usados se toman much
o más tiempo para adecuarse a la realidad y los dueños
no quieren bajar los precios, quedando entonces totalmente
sobrevaluados en comparación con un modelo 2016.
La consecuencia más directa es que
las ventas caen y el stock de seminuevos empieza a quedar sin rotación. Pero no solo eso, sino que el mercado de
0km podría empezar a sentir las consecuencias, ya que el 70% de las operaciones que se realizan en con la entrega de un usado.
Según Alberto Príncipe, presidente de la CAC,
los usados tienen un sobreprecio de 30%. “Históricamente, la diferencia entre un 0km y un usado fue de de 15%. Pero los modelos 2015 o 2014 fueron inflados, por eso hoy tendrían que
bajar un 20% para estar a tono”, explicó.
A esto se suma otro elemento: “Esto sería lo real si no fuera que
las marcas están realizando actualmente grandes bonificaciones a los autos nuevos, por lo cual, la rebaja de los precios de un usado deberían llegar a
30% para que el mercado se vuelva a mover”, comentó Príncipe.
Algunos casos concretos de disparidad entre los
nuevos y los usados se ven en Mercado Libre, donde los dueños definen el precio de sus vehículos. Por ejemplo, un
Ford Focus Titanium 2015, puede cotizar desde $440.000 hasta 495.000 pesos.

Precios de un Ford Focus modelo 2015 versión full según las cotizaciones en Mercado Libre
Si tomamos como referencia los precios de la gama del Focus en el sitio oficial de la marca, unidades cero kilómetros por supuesto, se puede ver que
por esos valores se puede acceder Focus SE Plus AT ($431.000) 0km, considerando que se debe reservar unos $25.000 de gastos de patentamiento y flete. Ni hablar si se opta por una versión con menor equipamiento, como el Focus S ($325.000) o el Focus SE y SE Plus ($369.600 y $405.800) .

Precios de todas las versiones del Ford Focus según las sugerencias de la marca
Otro caso concreto se observa al comparar un
Volkswagen Gol 0km y uno usado. Por uno que tenga un par de años encima,
los particulares piden entre $200.000 y casi $250.000 en Mercado Libre y claro está son valores de contado.

Cotización del Volkswagen Gol modelo 2015 en sus versiones más equipadas según lo que piden los dueños
Si bien el Gol ha demostrado ser un auto que se cotiza y no pierde valor a medida que pasan los años, sucede que
si uno se acerca a una concesionaria por consultar por uno con los nylon puestos se va a encontrar con versiones que arrancan en $189.000 y que pueden trepar hasta los $289.000, en caso de la versión tope de gama. Si a esto le sumamos que la marca está bonificando este mes $50.000 para el modelo, disponible para la versión 2017 y que se abre la posibilidad de financiarlo, conviene entonces aspirar a un okm.

Según el listado de precios de Volkswagen, el Gol sale entre $189.000 y $289.000. Además tiene grandes descuentos.
En otra marca donde se observan los precios de manera dispar es en
Chevrolet, en este caso con el Tracker. Mientras que por un modelo 2015 hay avisos que van desde $415.000 hasta $440.000, por uno nuevo de los más equipados habría que pagar $459.000. Es decir, comparando con el modelo más caro, la
diferencia es apenas de 4 por ciento.

A la izquierda, los pedidos de los dueños en Mercado Libre. A la derecha, los precios sugeridos por la marca.
El segmento de las
pick ups no esta ajena a esta realidad. Buscando, encontramos que por una Toyota Hilux 4×4 SRV 2014, es decir, con dos años de antigüedad, su dueño piden $640.000.

Valores publicado en Mercado Libre para una Hilux SRV 4×4 modelo 2014
Fuimos a la concesionaria y el vendedor nos pasó por la misma versión, pero 0km, un costo de $679.000, sin flete ni gastos de patentamiento. Incluso se puede bajar más la inversión, ya que ante nuestras constantes consultas, el asesor de venta quiso rematarla ofreciéndonos por $569.000 a una versión 4×4 con menor equipamiento. Otro dato importante es que, más allá de la antigüedad, se trata de un modelo diferente porque a fines de 2015 la pick up cambió de generación, por lo cual el precio tendría que tener aún una mayor diferencia.
En este caso, tomando un usado a $620.000, vemos que la diferencia entre un 2014 y un 2016
no llega al 10 por ciento del valor.

Valores oficiales por una Toyota Hilux modelo 2016 según la publicación de la marca
Usados: Sobrevaluados y “tiqui taca”
Además de adecuar los precios a un nuevo contexto, el problema que tiene el sector de usados es la falta de créditos. que sí favorecen a los nuevos. Mientras las terminales acordaron con el Gobierno y los bancos Provincia y Nación,
planes a largo plazo con tasa bajas, o diseñaron las líneas con bancos privados, para comprar usados no hay propuestas atractivas.
Peugeot es la única marca que promociona una línea con tasas de 9% hasta 36 meses, para la renovación de unidad en buen estado.
Según Príncipe, las únicas opciones para salir adelante son:
bajar los precios y ofrecer créditos. De otra manera, augura que hacia fin de año será arrastrado el segmento de 0km y no podrá concretarse la tan ansiada recuperación.