El crecimiento sostenido que tenían desde hace más de un año empezó a disminuir tras la gran devaluación que se vivió en mayo y aparecen las primeras señales de enfriamiento

A 3 días para que cierre mayo, la venta de 0km entre el 1 y el 28 de mes registra una baja de 4% en comparación con el mismo período del año pasado, con un total de 59.464 unidades patentadas frente a las 59.744 de 2017. Si bien la caída no es significativa, muestra un enfriamiento del sector que venía creciendo a tasas de 2 dígitos mensuales. La prueba es que entre el 1 y el 28 de abril de este mismo año se habían vendido 76.516 0km, es decir, un 28% más que lo obtenido hasta el momento. En los concesionarios atribuyen el cambio de escenario a la suba del dólar, que provocó un incremento del precio de los autos nuevos, al tiempo que aumenta la desconfianza e incertidumbre de los consumidores.  Los últimos días de esta semana serán clave para recuperar esa diferencia y acercarse a mayo de 2017, cuando se superaron los 70.000 patentamientos. De lo contrario, sería el primer mes, después de mucho tiempo que muestra un cambio de tendencia En los concesionarios, más allá de los números, coinciden en que las ventas se enfriaron y que las consultas bajaron notablemente. “De 20 personas que entraban por día, hoy entran 3, y apenas preguntan por algún modelo, tampoco cierran la compra”, explicaron en un concesionario Toyota. En otro punto de venta oficial de Ford agregaron que la baja se siente más en los segmentos más chicos, donde las subas de precios fueron fuertes (en algunas marcas llegaron al 10%) y es además el segmento donde accede un comprador que cuenta más el peso para obtenerlo. Por otro lado, en los modelos premium o los autos del segmento grande, hubo un movimiento distinto ya que muchos han mantenido sus valores o hasta llegaron a bajarlos para evitar que los incrementos lleven los autos al nivel del impuesto interno. Ese es el caso del Volkswagen Passat Highline, que se “abarató” casi un 8%, de u$s55.000 a u$s50.000, para evitar caer en el segundo nivel del tributo que aún está vigente.                     Para los especialistas, la suba del precio de los autos es uno de los factores que detuvieron las ventas, pero también impacta la incertidumbre: “Hay dos tipos de reacciones de los compradores de autos en estas situaciones, está aquel que elige guardar el dinero esperando para ver que pasa con la economía, y en lo posible dolarizarse; y aquel que lo invierte, pensando que los precios aumentarán y es preferible tomar decisiones de compra rápido”, explicó el directivo de una terminal. Es lógico, por otro lado, que en medio de la incertidumbre se piensen más las decisiones, y eso puede afectar el curso del mes. Por otro lado, en los concesionarios aseguran que aunque hasta el lunes los números fueron a la baja, siempre los tres últimos días del mes son clave porque muchas marcas tienen que alcanzar objetivos y se apresuran las operaciones, ya sea con descuentos o con el “auto-patentamiento”, a fin de no perder los premios mensuales.

Es el resultado del impuesto interno, inflación y devaluación. Para 2015 los concesionarios piden que se revea el tributo y que se actualice cada tres meses.

Los 0km cerrarán el año con el incremento más notable de los últimos años. Después de subir en promedio un 20% anual, el cambio económico impactó en el sector y provocó una suba superior a la inflación general de la economía que miden las consultoras privadas. Los datos fueron revelados por la Asociación de Concesionarios Automotores (ACARA), quienes al mismo tiempo reclamaron cambios para el impuesto interno el año próximo. Desde el sector explicaron que de no ser movible, serán cada vez más los modelos afectados por el tributo y esto seguirá modificando los precios de los 0km. Las primeras modificaciones La suba de costos de los vehículos arrancó con la devaluación del primer trimestre del año, la cual fue trasladada rápidamente a los modelos de todas las marcas. Sucede que, aunque no sean de alta gama, tienen el 80% de las piezas importadas y están atados al dólar. En cuanto al impuesto, fue pensado en un principio para los vehículos de alta gama, los cuales fueron gravados con subas que llegaron al 100% en algunos casos. Así, los valores pasaron de u$s50.000 promedio en el caso de un sedán mediano de las alemanas, a u$s90.000. Sin embargo esa suba también llegó a marcas masivas y modelos como Ford Focus III, Toyota Corolla y Citroën C4 Lounge tienen impuesto. También las SUV, tanto de alta gama como de marcas masivas, sufrieron la aplicación del impuesto y sus precios se dispararon. Por ejemplo una 4×4 de Toyota, la SW4, en su versión full, supera los 840.000 pesos. Con estos antecedentes, los patentamientos cerrarán el año con 670.000 unidades, y el año próximo estarán atados al contexto económico y los incentivos del Gobierno al sector. Sin medidas de apoyo, las ventas caerían hasta las 550.000 unidades.