Economía adelantó que el 31 de diciembre se pondrá fin al decreto. De esta manera, los autos importados deberían bajar de precio y cotizar al nuevo tipo de cambio oficial, de $14. ¿Qué pasará con el resto de los vehículos?

El gobierno de Mauricio Macri ya dio varias señales que cambiarán el rumbo de la industria automotriz con dos consecuencias que son un hecho: por un lado,
beneficiarán a la producción al tener más dólares para negociar; y por el otro, afectará los valores de todos los 0km, ya que deberán trasladarse a precios los costos de la devaluación.
La primera medida fue la
eliminación del cupo de importación, la cual había restringido el gobierno de Cristina Kirchner y ponía un tope al ingreso de autos por parte de las automotrices. Ahora, las marcas tienen libertad para decidir que modelo comercializar o no, sin tener que hacer cálculos para aprovechar mejor el cupo.
La segunda medida fue la
liberación del cepo, que marca directamente el rumbo del sector teniendo en cuenta que necesita
dólares para importar partes o vehículos terminados, al tiempo que también gran parte del valor de los 0km se determina teniendo en cuenta esta moneda (el 70% de los vehículos que se fabrican a nivel local utilizan partes importadas).
Por último, la noticia más esperada es sobre la
eliminación del impuesto interno que se aplica desde enero de 2014 a los autos que superan un cierto valor. En esa escala entran todos los
importados de alta gama y por ser un tributo con base fija, involucra también a muchos masivos del segmento medio y alto.
La medida no solo que
no mejoró la recaudación, ya que eran muy pocos los autos premium que se vendían y por lo tanto la fuga de dólares no era representativa, sino que retrajo la industria, paralizó las ventas, e hizo que el impuesto se derrame a otros segmentos, incluso a vehículos que se fabrican en la Argentina.
El ministro de Economía Alfonso Prat Gay dijo que se eliminará el impuesto. Por lo tanto, los
autos debería bajar entre un 50 y 100%, porque ese era el incremento que significaba en precios. Por otro lado, un vehículo en dólares que hasta hace unos días cotizaba al tipo de cambio de $9,80, de ahora en más lo hará a $14, o según el valor oficial del dólar al momento de la operación.
Por ejemplo, un
BMW Serie 3 que en diciembre de 2013 salía u$s52.000, hoy tiene un precio de u$s86.000. Este monto debería ajustarse, y luego el precio se obtendría según el dólar a $14. El valor actual estaría en $728.000 al día de hoy si se retrotrae a 2013. Hay que tener en cuenta que si bien los autos aumentaron en 2 años, los importados siempre tienen valores más estables y se ajustan muy poco año tras año. Por ejemplo en 2009, el mismo Serie 3 salía u$s46.000. Es decir en cuatro años aumentó solo u$s6.000.
En cuanto al resto de los autos, desde ACARA sostienen que la
devaluación del 40% podrá impactar en mayor medida en los vehículos del segmento medio, muchos de los cuales estaban contenidos para que no los alcance el impuesto. Se trata de modelos como Ford Focus, Toyota Corolla, Peugeot 408 o Renault Fluence, entre otros.
Por otro lado, en los
chicos como Volkswagen Gol, Chevrolet Classic y Fiat Palio, consideran que ya hubo muchos incrementos y
no deberían moverse los valores. Por ejemplo el Gol Trend pasó de $70.000 en 2013 a $141.000 en la actualidad. Lo mismo un Classic, que aumentó de $83.000 a $171.000 en dos años.
A partir de enero las automotrices reacomodarán las listas sugeridas y empezará una nueva carrera por no perder patentamientos tras las subas.