Allí se gestan dos de los modelos más importantes de la marca: Hilux y SW4. Ahora, con la inversión de u$s800 millones, se podrá ampliar la capacidad de producción para conquistar otros mercados.

Mauricio Macri será parte de la inauguración oficial de la planta que Toyota posee en la localidad bonaerense de Zárate. Se trata de una gran apuesta de la japonesa, que destinó 800 millones de dólares a la obra que permitirá pasar de 92.000 unidades a 140.000 unidades al año. El desafío, a largo plazo, es convertir la fábrica argentina en una base de producción y exportación de los modelos Hilux y SW4 para América Latina, y, por qué no, incorporar algún nuevo modelo para su producción. La Hilux se fabrica en el país desde el inicio de la instalación de la empresa, en 1997.  Pasó por varios restylings y cambios, hasta la octava generación que fue presentada en noviembre. Es la número uno en ventas, consolidada como líder absoluta y con la cual Toyota pretende alcanzar el 50% del mercado de pick ups. En cuanto a la SW4, se comenzó a producir en el país en 2005. Es también uno de los SUV líderes entre los medianos, comercializada en su octava generación desde diciembre. Con esta ampliación, la japonesa sumó más de 1000 puestos de trabajo y cuenta con 4.900 personas trabajando en el lugar de forma directa y más de 25.000 lo hacen de forma indirecta. Además, uno de los objetivos es consolidarse como una gran exportador. En 2012, según un comunicado de la empresa, “Toyota Argentina exportó 63.000 vehículos -el 70% del total de su producción anual- a Brasil y otros 14 países de América latina”. A partir de este año, cuando se espera llegar a otros mercados regionales, entre ellos México, las exportaciones llegarían a 110.000 vehículos. La inversión también contempla “la construcción de 115.000 metros cuadrados de nuevos edificios, 131.000 metros cuadrados de playas logísticas, una nueva planta de autopartes en la planta de Zárate (producción in house ), una nueva línea de pinturas ED (cataforesis) y 4,3 kilómetros de caminos de acceso a la planta”.  

Hasta el domingo, podes comprar un Onix, Prisma, Classic o S10 pagando mucho menos del precio de lista. Es parte de una nueva campaña de la marca que busca convertirse en la más vendida

Chevrolet anunció que el miércoles 2 de marzo las puertas de sus 53 concesionarios y 110 bocas de ventas estarían cerradas por 24 horas. Al día siguiente, el jueves, la reapertura fue con muchas novedades. Y con gran expectativa gracias al largo suspenso. Se trata nada menos que de una acción de marketing, la cual fue tan insólita como arriesgada, ya que la marca usó como llamado de atención la suspensión de todas las actividades de venta, con el objetivo de retomar con más fuerza y demostrar que “algo nuevo se estaba gestando”. La promoción, que estará vigente hasta el domingo, brinda la posibilidad a los clientes de adquirir los modelos de la marca con una rebaja de $40.000. El descuento se aplica a los modelos Onix, Prisma, Classic y S10, la pick up que, según los directivos de la marca, también apuestan a que se convierta en la más vendida. Otra de las acciones es la posibilidad de comprar un vehículo financiado a 18 meses con tasa 0, a través de GPAT Compañía Financiera. Se trata de una estrategia que tiene como objetivo apuntalar las ventas y terminar siendo la marca más vendida del mercado. Chevrolet logró un récord en febrero con más de 8200 unidades patentadas, lo que representó un crecimiento interanual del 55% comparado con el mismo mes de 2015. Otro dato importante es que el Onix está siendo toda una revelación e ingresó al top 10 de ventas este año luego de que superara las 11.000 unidades comercializadas en 2015. Para 2016, la marca presentará 10 novedades, empezando por el vehículo global que será fabricado en la planta de GM en Rosario y cuya inversión asciende a u$s740 millones e incluye la construcción de una nueva planta de motores de última generación.